Auditorías de Terceros e Inspecciones

Una de las claves para el éxito de cualquier auditoría de Higiene Alimentaria y Buenas Prácticas de Manufactura (BPM) es "conocer de quién estás comprando". Para lograr esto, las instalaciones de los proveedores de alimentos deben ser inspeccionadas de manera regular por nuestros propios auditores. Esto debe realizarse de forma integral pero rentable. Todas sus instalaciones y procesos, así como aquellos proveedores y distribuidores que atienden sus necesidades de materiales alimentarios, almacenamiento y transporte, deben ser evaluados regularmente por auditores.

Sin embargo, los estándares y requisitos adecuados y actualizados solo pueden verificarse a través de auditorías aprobadas de terceros. La combinación de estos dos métodos es la mejor manera de protegerse contra incidentes inesperados de seguridad o calidad. Al mismo tiempo, el proceso debe llevarse a cabo de manera integral pero rentable.